Fútbol ecuatoriano

La astronómica cifra que debe Emelec, es impagable

Emelec deberá implementar un plan de reestructuración financiera para revertir la situación

Por Kary Vargas

Jorge Guzmán. FOTO: Extra
Jorge Guzmán. FOTO: Extra
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La situación financiera del Club Sport Emelec ha generado preocupación entre sus aficionados y en el mundo del fútbol ecuatoriano. Recientemente, el presidente del club, Jorge Guzmán, reveló en una entrevista una cifra alarmante: el déficit del equipo estaría bordeando los 36 millones de dólares. Esta declaración ha puesto en evidencia la difícil realidad económica que atraviesa el equipo "eléctrico" y ha generado un debate sobre las posibles soluciones para revertir esta situación.

Una Herencia Económica Complicada

Jorge Guzmán, quien asumió la presidencia de Emelec en un momento crítico, ha sido transparente al hablar sobre la situación financiera del club. En sus declaraciones, ha señalado que el déficit millonario es una herencia de administraciones anteriores, que no gestionaron adecuadamente los recursos del club.

"A día de hoy el déficit del club debe estar bordeando los USD 36 millones", declaró Guzmán, evidenciando la magnitud del problema. Esta cifra refleja la acumulación de deudas, gastos excesivos y una gestión financiera deficiente que ha afectado la estabilidad económica del club.

Las razones detrás del déficit millonario son diversas y complejas. Entre los factores que han contribuido a esta situación, se pueden mencionar:

  • Gastos Excesivos en Fichajes: En los últimos años, Emelec ha realizado fichajes costosos que no siempre han dado los resultados esperados.
  • Deudas con Jugadores y Proveedores: El club ha acumulado deudas con jugadores, cuerpos técnicos y proveedores, lo que ha generado demandas y sanciones.
  • Mala Gestión de Ingresos: La gestión de los ingresos por derechos de televisión, taquilla y patrocinios no ha sido eficiente, lo que ha limitado la capacidad del club para generar recursos.
  • Falta de Transparencia: La falta de transparencia en la gestión financiera ha dificultado el control de los gastos y la detección de posibles irregularidades.

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